Contra los tiranos de siempre

El 97º aniversario de la creación del primer Concejo Deliberante local ha servido para que nuestro líder comunal, inconmensurable como el tiempo, rescate del arcón de los opacados por su figura y bruña nuevamente el bronce de José Manuel Estrada.

En una nueva demostración de humildad y patriotismo, nuestro glorioso intendente ha sabido, con su elocuencia habitual, ensalzar la figura de nuestro prócer para que no quede en la historia como la segunda víctima de las tiranías que azotaron al pueblo argentino (todos sabemos que a los segundos no los recuerda nadie).

Estrada, lejos de la conducta ejemplar de luchar desde adentro como nuestra leyenda viviente Pirincho, habló alguna que otra vez mal del tirano de Rosas, pero timorato de hacerlo mientras estaba vivo, el más recordado de los discursos lo hizo un año después de muerto el diabólico, rencoroso, maldito.

Desde ya anunciamos como prueba irrefutable de la lucha inclaudicable contra las tiranías y diciéndolo ahora que todavía vive, sin que nos tiemble el pulso, sin que nos nuble la razón, sin dudar ni un instante de las profundas convicciones democráticas que posee nuestro Ser Supremo que no vamos a ir a su funeral, sea cuando sea. No nos van a convencer que le fué provechosa su gestión a la provincia ni al país, nosotros los que tuvimos que someternos a su voluntad aquí en nuestra querida Santa Cruz y que escuchamos su canto de sirena sabemos que no es cierto. Si bien ocupamos cargos mientras ostentó el poder y aunque nos reunimos miles de veces con su gente, con esos ladinos que tanto le han robado a la Patria y tanto han defraudado a Dios. No señores, no tenemos miedo de él y su alianza con el Diablo. Desde la capital de la provincia de Santa Cruz le decimos a usted que no pensamos en velarlo ni hacer homilías en su nombre aunque nuestra pasión democrática y cristiana nos pruebe. Sépalo usted TIRANO no vamos a poner flores en su tumba MI GENERAL JORGE RAFAEL VIDELA.